Jueves de instructable: Mesa práctica, liviana y barata.
Para realizar esta mesa se puede decir que sólo hace falta saber clavar. Naturalmente que antes se habrá tenido que adquirir toda la serie de listones que se precisan para formar la peana: Base o apoyo para colocar encima una escultura u otro objeto.
Estos listones pueden encargarse a medida en cualquier establecimiento de maderas dedicado al bricolaje o bien a un carpintero amigo. Otra solución, y quizás la más barata, es la de solicitarlo a una aserrería.
Los listones son cuadrados, con una sección aproximadamente de 30 x 30 mm. Estas medidas pueden variar en unos 2 mm en más o menos. Pero hay que tener esto bien presente, pues con la cantidad de veces que esta diferencia se va acumulado en la altura de la mesa, el resultado final de la misma puede resultar bastante cambiado. De todos modos, un simple cálculo permitirá establecer si se tendrá que suprimir (en el caso que los listones fuesen más gruesos) o bien añadir (en el caso de que fuesen más estrechos) alguno al número de listones que forman la mesa.
La mesa tal como se presenta aquí corresponde a una altura de 63cm (21 listones superpuestos x 3 cm = 63), más el grosor del tablero del cristal. Si los listones utilizados fuesen de 32 mm de grosor, la mesa tendría en total 67,2 cm, y bastaría suprimir un solo piso de listones para lograr una altura semejante a la propuesta (64 cm).
Ya se ha dicho que sólo basta clavar para realizar esta mesa. Pero también se tiene que afirmar que hay que saber clavar bien y realizar las uniones y superposiciones de cada piso de listones con el máximo esmero, pues si esto no se tiene en cuenta, en lugar de esta sencilla pero correcta apariencia de la mesa, el resultado parecería una jaula hecha con madera de derribo. Para evitarlo hay que utilizar el simple útil que se acompaña en el croquis, que hará dos funciones: de cartabón para escuadrar un madero con otro y de distanciador para que aquellos listones que se fijan sin coincidir opuestamente por sus extremos se superpongan, rebasando por igual allí donde esto se produce, es decir, en los tres pisos que forman como la peana.
En el dibujo están dispuestos los listones por su orden de colocación. Lo mismo puede empezarse a construir por arriba que por abajo. Antes de proceder al clavado, y partiendo de listones ya recortados a la medida y con sus caras pulidas, conviene matar las aristas de los listones con papel de lija de granulación media.
Si se quiere realizar un trabajo más cuidadoso, un buen bricolador puede realizar un sistema constructivo más elaborado y perfecto a base de enclavijado… En cualquiera de los casos hay que aportar cola a las uniones.
El acabado pueden realizarse antes de la unión o bien cuando la peana de listones esté lista. En el primer caso cabrá la posibilidad de hacer intervenir la fantasía y pintar cada listón o grupo de listones de colores diferentes, alternar los colores en los pisos, etc.
El tablero que corona la mesa tendrá 120 x 120 cm y se puede encargar a un cristalero para que lo corte y pula sus cantos y arrome ligeramente los ángulos rectos. Unos tacos de espuma clavados en los listones evitarán que el tablero de cristal se escurra.
Fuente: Libro “Hágalo usted mismo” Tomo 7.